El sistema utiliza una especie de hoja sensible a la presión que mediante 360 sensores capta 39 «características» que identifican a una persona con un 98 por ciento de precisión, aunque el problema es que por lo visto el porcentaje de éxito tiende a variar según la ropa que lleve puesta la persona, y que no es lo mismo un chino que un vaquero.
Así que… Vayan bajándose los pantalones, señores.
No hay comentarios:
Publicar un comentario