jueves, 14 de abril de 2011

Acertijo para la hora de la merienda...

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En una ocasión, el jefe de los monjes shaolin pidió a sus diez discípulos
más aventajados una prueba de obediencia ordenándoles recolectar
1000 margaritas cada uno para proceder a despetarlas y
anotar en sus cuadernos si el número de pétalos obtenido en
cada una de las margaritas recogidas era par o impar.

Obviamente, la mayoría de los alumnos se pasaron la tarde paseando
por ahí haciendo ver que recogían las flores
y durante la noche procedieron a inventarse series de par e impar
que transcribieron en sus cuadernos frenéticamente.

Al día siguiente, el maestro examinó detenidamente los cuadernos
de los alumnos y en un abrir y cerrar de ojos descubrió a los impostores
ordenando su expulsión de la orden por desobediencia.

¿ Cómo pudo el maestro saber tan rápido distinguir a los obedientes de los desobedientes ?
 

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1 comentario:

Ortizarchitect dijo...

porque los que estaban haciendo como q cojían mil flores eran los impostores, los demás no habían tenido tiempo d hacerlo!

LENGUA: davidortizaba@hotmail.com